Santa Elena se encuentra en el Océano Atlántico, entre América del Sur y África. El territorio pertenece oficialmente a Gran Bretaña, la isla está sujeta a la reina inglesa Isabel II. Está a cargo de un gobernador. Santa Elena es uno de los lugares más bellos y al mismo tiempo remotos y sordos del planeta. Aquí no hay aeropuerto, por lo que solo se puede llegar por mar. La isla es un pequeño pedazo de tierra, rodeado por todos lados por un inmenso océano. La tierra más cercana es la Isla Ascensión, que se encuentra en el noroeste, a 1125 km de Santa Elena.
Como ya se señaló, la única forma de llegar a la isla es por mar, el único barco que navega a este lugar 22 veces al año va aquí. Si sale del Reino Unido, el viaje durará aproximadamente dos semanas, si es desde Ciudad del Cabo, no más de 5 días. La isla fue descubierta en 1502 por el portugués Juan da Nova. Tanto los británicos como los holandeses querían apoderarse de este territorio, pero sin embargo, el primero ganó.
Inicialmente, Santa Elena sirvió como military una base de alimentos, su tarea era suministrar alimentos a todos los barcos que enarbolaban la bandera británica. A principios del siglo XIX, se convirtió en el último hogar del famoso cautivo Napoleón Bonaparte. Aquí está su tumba.
Antes, Santa Elena era un volcán, todavía existen volcanes extintos en el sur, que se elevan a una altura de 818 metros. La mayor parte del territorio está ocupado por arbustos y prados. Los árboles más comunes son los cipreses, eucaliptos y abetos. La población de la isla fluctúa en torno a las cinco mil quinientas personas. La ciudad de Jamestown es el centro administrativo, el gobernador inglés mantiene el orden. El gobierno local tiene derecho a decidir las cuestiones económicas de forma independiente, pero la isla debe resolver las cuestiones políticas y militares junto con el Reino Unido.
Santa Elena vive una vida mesurada y tranquila. Los residentes locales se dedican a la pesca, al comercio de diversos productos de su propia producción, así como a la cría de ganado. Muchos cultivan vegetales, varios cultivos. El café es especialmente valorado, aquí se cultivan las variedades más caras del mundo, no en vano, pues en 1994 David Henry construyó la primera empresa productora de café en la isla. Los bienes industriales y el combustible se importan aquí, y la isla misma exporta lino.
Cada año, la isla de Santa Elena es visitada por una gran cantidad de turistas que no temen en absoluto ni su lejanía de los continentes ni la ausenciaaeropuerto. Atrae como un imán con su hermosa naturaleza, así como lugares interesantes. Los visitantes pueden ver muchos edificios antiguos y visitar la tumba de Napoleón Bonaparte en el valle del Sena.
Pero aún así la principal atracción es la naturaleza. Algunas especies de plantas solo se pueden ver aquí, entre ellas hay muchas especies en peligro de extinción. En la costa se puede observar una gran cantidad de aves, entre ellas no solo los habitantes de la isla, sino también aves que llegan para el invierno desde países europeos. También en la costa puedes encontrar lugares donde las tortugas marinas entierran sus huevos.